Holyhead se encuentra al otro lado de Anglesey, que es, técnicamente, una isla separada de Gales por el angosto Estrecho de Menai. Las montañas distantes proporcionan un telón de fondo siempre presente, que atrae a los visitantes para investigar su belleza. El encanto rural del Norte de Gales se combina con algunas características inesperadas, ya que, tal vez para sorpresa del visitante casual, esta es un área que ha tenido protagonismo en varios de los grandes momentos de nuestra historia.